ANCHOA AHUMADA

El Cantábrico es generoso con los pueblos que baña. En sus aguas frías y limpias se encuentra el mejor pescado, de calidad y sabor insuperables. 

Los bocartes con los que preparamos las conservas de Rosalita se capturan en la zona del Golfo de Vizcaya durante los meses de primavera. Se pescan de forma sostenible y con artes tradicionales. A nuestros obradores llegan solo los de mejor calidad, después de seleccionarlos en la lonja. 

Por experiencia, sabemos que cualquier preparación de pescado es mucho mejor cuanto más corto es el proceso, cuanto menos tiempo transcurre entre la captura y el momento en que la conserva está lista. Por eso de la lonja solo nos traen la cantidad de pescado que podemos preparar en el día.

El Cantábrico es generoso con los pueblos que baña. En sus aguas frías y limpias se encuentra el mejor pescado, de calidad y sabor insuperables. 

Los bocartes con los que preparamos las conservas de Rosalita se capturan en la zona del Golfo de Vizcaya durante los meses de primavera. Se pescan de forma sostenible y con artes tradicionales. A nuestros obradores llegan solo los de mejor calidad, después de seleccionarlos en la lonja. 

Por experiencia, sabemos que cualquier preparación de pescado es mucho mejor cuanto más corto es el proceso, cuanto menos tiempo transcurre entre la captura y el momento en que la conserva está lista. Por eso de la lonja solo nos traen la cantidad de pescado que podemos preparar en el día.

Las mujeres del mar que preparamos los boquerones en vinagre de Rosalita estamos en Getaria. En nuestro pueblo, la tradición conservera se remonta al S.XVI.

¿Sabes una cosa?  En el S. XVIII, todas las empresas conserveras estaban regentadas por mujeres. Mujeres del mar. ¡Para que digan del sexo débil! En aquella época se hacían sobre todo salazones y escabeches.

La industria de la conserva siempre ha tenido mucho de matriarcado. En Getaria trabajamos las descendientes de aquellas mujeres emprendedoras, y llevamos en la sangre la tradición conservera.

Además de utilizar artes de pesca tradicionales, también ahumamos las anchoas como se ha hecho toda la vida, con humo natural de madera de haya, sin conservantes ni aditivos.

El resultado es una anchoa con un color muy característico y un sabor delicado. Mis compañeras más veteranas siempre dicen que les recuerda a cuando eran niñas. ¡Claro, si las hacemos exactamente igual! Las anchoas ahumadas de Rosalita ofrecen la oportunidad de disfrutar un sabor de los de antes, ¡una exquisitez!

Cuando las anchoas llegan a nuestro obrador, las descabezamos, las metemos en las parrillas y las pasamos por el ahumador, para que su sabor adquiera esos matices tan especiales, ese toque a humo que nos conecta con tiempos remotos…

Una vez ahumadas las limpiamos y las envasamos una a una. Todo el proceso se realiza a mano, igual que otras preparaciones de bocarte. Es la única forma de garantizar el nivel de calidad que se espera de una anchoa de  Santoña, ¡por algo son las mejores anchoas del mundo!

Cuando las anchoas llegan a nuestro obrador, las descabezamos, las metemos en las parrillas y las pasamos por el ahumador, para que su sabor adquiera esos matices tan especiales, ese toque a humo que nos conecta con tiempos remotos…

Una vez ahumadas las limpiamos y las envasamos una a una. Todo el proceso se realiza a mano, igual que otras preparaciones de bocarte. Es la única forma de garantizar el nivel de calidad que se espera de una anchoa de  Santoña, ¡por algo son las mejores anchoas del mundo!

¿Cuántas veces has oído decir lo sano que es el pescado azul? Las anchoas ahumadas tienen casi las mismas propiedades nutricionales que el bocarte fresco. Son una fuente estupenda de omega 3, el ácido graso aliado de tu salud, que ayuda a reducir los niveles de colesterol y previene trombos de la sangre.

Además, aportan un montón de proteínas , vitaminas: A, B2, B3, B6, B9, B12 y D, y minerales como hierro, potasio, magnesio y yodo.

Y por si no lo sabías: las anchoas no engordan. Prepara un aperitivo con estas anchoas siempre que quieras, ¡y disfruta sin remordimientos!